Ojalá el maquillaje estuviera fabricado con sustancias capaces de eliminar rastros de llanto, ojos rojos y desesperados, marcas de abandono
o esa mueca tan incomoda que aparece cuando tratamos de fingir una sonrisa o las ojeras de una noche de espera al huésped que nunca llego a su destino, ojalá se pudiera solo cubrirse la cara, sonreír y que nadie supiera lo que hay detrás.

No hay comentarios:
Publicar un comentario